La Navidad es como el dedo pulgar. El pulgar es el más cercano a ti.
Así que en Navidad empieza orando por quienes están más cerca de ti.
Son las personas más fáciles de recordar. Orar por nuestros seres queridos es «una dulce obligación».
La Navidad es como el dedo pulgar. El pulgar es el más cercano a ti.
Así que en Navidad empieza orando por quienes están más cerca de ti.
Son las personas más fáciles de recordar. Orar por nuestros seres queridos es «una dulce obligación».